viernes, 24 de junio de 2011

Conclusión


Nosotras creemos que la película "La sociedad de los poetas muertos" nos muestra que la vida es solo una y que debemos disfrutar minuto a minuto, haciendo de ella el uso que uno estime conveniente y necesario, para así poder ser feliz y sentirse completamente realizado.
 Y nos da ha entender que ser docente conlleva una mayor responsabilidad a la que aparentemente queremos creer. Pues hasta los más innovadores planteamientos didácticos requieren del respeto por la propia maduración del niño y el momento vital del adolescente.
Por último, la película toca un punto vital para todo aquel que se considere un educador ya sea un padre o un maestro: el respeto por la vocación, la pasión y las circunstancias de los jóvenes, así como que cada cosa tiene su lugar, cada aprendizaje debe tener su tiempo de maduración.
Según Alfonso López Quintás  "Al elegir en cada momento no lo que más nos apetece, sino lo que más nos lleva a realizar el ideal de la unidad a través del encuentro, ganamos la verdadera libertad, la liberta creativa, y nos hacemos responsables y creativos" 

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